Nos caemos y nos hacemos una herida, ¿qué tipo de producto debemos utilizar?
En el mercado encontramos muchos tipos de antisépticos y desinfectantes». Sin embargo, no todos se utilizan para lo mismo. Por lo tanto, conviene saber cuáles de ellos son los más idóneos para usar cuando nos hacemos una herida.
En este post explicaremos las diferencias entre unos y otros.
De entrada, hazte con un botiquín casero que contenga material de cura básico como gasas, apósitos, antiséptico, esparadrapo y suero fisiológico
¿Es lo mismo un desinfectante y un antiséptico?
Aunque muchas veces utilizamos ambos términos indiscriminadamente, no son exactamente lo mismo.
El término desinfectante se emplea para productos químicos que eliminan microorganismos de superficies inertes (desde el material de quirófano hasta el suelo). Sin embargo, un antiséptico es un producto químico que desinfecta y elimina bacterias, hongos, virus y esporas de tejidos vivos como piel o mucosas (por ejemplo, heridas). Su uso es tópico y no tiene absorción sistémica.
Vamos a repasar los pasos que hay que seguir cuando te haces una herida, antes de aplicar un antiséptico.
El paso más importante cuando te acabas de hacer una herida es lavarla con suero fisiológico y una gasa. Evita el algodón, porque puede dejar fibras en la herida. También puedes limpiarla con agua y jabón para eliminar la suciedad.
Después hay que utilizar el antiséptico que hayamos elegido y deberemos tapar la herida y no dejarla al aire. Si se queda destapada, corremos el riesgo de que se vuelva a infectar.
Empezamos a explicar los diferentes antisépticos (debes tener por lo menos uno en tu botiquín):
Povidona yodada,
El betadine es povidona yodada. Se trata de un desinfectante muy económico que permite eliminar las bacterias que pueden impedir una adecuada curación de las heridas. El betadine es un producto que tiene propiedades bactericidas y antifúngicas.
Estas propiedades del betadine lo convierten en un producto indispensable que siempre tiene que estar en el botiquín. Sin embargo, solo debe usarse sobre quemaduras y heridas leves. Tras su aplicación, debemos dejar que se seque
El yodo es activo frente a numerosos microorganismos, más concretamente a bacterias (Gram+ y Gram-), protozoos, hongos, esporas y virus. Se puede utilizar para desinfectar heridas, quemaduras o rozaduras. La povidona yodada actúa mediante un mecanismo de oxidación de las células, destruyéndolas.
El único inconveniente es que tiñe un poco la piel, manchando todo lo que toca (tranquilidad, es una mancha reversible). Puede tardar hasta 3 minutos en hacer efecto.
Las personas con alteraciones en la glándula tiroides (hipo o hipertiroidismo) y personas tratadas con litio (utilizado en trastornos bipolares) no deben utilizar povidona yodada de manera prolongada en el tiempo.
Tampoco es recomendable usarlo ni en niños ni en mujeres embarazadas.
La clorhexidina,
No es efectiva frente a virus ni pseudomonas. Suele ser el antiséptico de elección porque es incoloro, no mancha y es efectivo pasados los 15 segundos después de su aplicación. Se puede utilizar con total seguridad en niños y mujeres embarazadas.
Puedes encontrar Clorhexidina en forma de spray, de manera que facilita la aplicación.
¿Qué ha sido de utilizar alcohol y agua oxigenada en las heridas? ¿Ya no se lleva?
El alcohol etílico o alcohol de 96º, que es el que se suele tener en casa, no debe utilizarse para desinfectar heridas porque irrita (y pica) y deteriora la piel sana.
Alcohol y agua oxigenada, ¿cuándo se deben usar?
El alcohol es efectivo frente a las bacterias, tiene acción débil frente a virus y hongos y no funciona frente a las esporas.
El agua oxigenada o peróxido de hidrógeno no es muy efectivo porque la enzima catalasa, que tenemos en nuestra piel, la descompone rápidamente. Tiene una actividad leve frente a los microorganismos en general.
¿Cuándo sí acudir a un centro de salud u hospital?
Si el sangrado de la herida es abundante o a chorro o la herida es profunda o grande o si sus bordes están muy separados; si se ha producido en la cara, los ojos o en los orificios naturales (boca, nariz, genitales); si tiene dentro cuerpo extraños muy enclavados —ni los intentaremos quitar, por riesgo a que sangre más—; y si no estás seguro de la gravedad.
Si la herida empeora, lo mejor es acudir a tu médico o enfermera para que la valore.
EN RESUMEN, CÓMO CURAR UNA HERIDA
- La persona que haga la cura debe lavarse las manos y, si es posible, usar guantes desechables; sin látex son los más recomendables.
- Si la herida sangra, hay que tratar de detener la hemorragia presionando una gasa sobre la lesión. Una vez que deja de sangrar, debemos limpiarla, con agua y jabón suave, desde el centro hasta los bordes.
- Si la herida tiene cierta profundidad, es aconsejable limpiarla con suero fisiológico y seguir el mismo procedimiento.
- Una vez que la herida está limpia, ¿ qué usar? Clorhexidina es lo que indican distintas guías de primeros auxilios. Lo idóneo es alguna sustancia que no tiña, “comprobando antes que la víctima no sea alérgica a sus componentes”, Eso sí, nada de emplear algodón.
- Para proteger la herida y evitar que se reabra e infecte, la cubriremos con un apósito, tirita o vendaje.
- ¿Y después? Toca examinar la herida a diario. Si el apósito se moja, hay que retirarlo y poner uno nuevo.
- Y cuando la herida empiece a cicatrizar, formando una costra, ya no será necesario seguir cubriéndola.
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